La noción fundamental de la cultura maya es que todo tiene un yuum, que en español puede traducirse como dueño o responsable, aunque esta traducción no captura completamente el concepto desde la visión capitalista de la posesión de bienes y objetos. Estos “responsables” son entidades que protegen a los animales, determinados espacios geográficos y a las personas, tanto colectiva como individualmente. Además, funcionan como guardianes de la naturaleza, regulando el equilibrio entre todos los seres vivos. Así lo expresó el maestro Eli Concepción Casanova Morales en la charla “Algunas entidades mayas y su relación con la vida de los pueblos de Yucatán”, durante una de las conferencias de la jornada Oriente Intercultural.
El ponente, de origen maya, lingüista y especialista en esta cultura, compartió información sobre el tema, fruto de sus investigaciones sobre el concepto del cuerpo y la persona entre los mayas, así como los fenómenos atmosféricos en la lengua maya actual. El profesor de la UNAM desde 2015, hizo referencia a entidades como el Báalam, kanáan jo’ kaaj, el guardián de los pueblos y sus habitantes. Desde la perspectiva maya, estos seres se sitúan en las cruces al final de los límites del pueblo durante la noche, protegiendo a los pobladores de otras entidades dañinas.
Entre las herramientas asociadas a estas entidades se encuentran las escobas, abanicos y sogas, que les ayudan a proteger la entrada del mal, mencionó el especialista. Otra entidad relevante es el Sip Kuts, responsable de los pavos de monte. Su función es proteger a estas aves, guiándolas hacia fuentes de alimento y agua, y manteniendo el equilibrio de su población. Por ejemplo, si las personas cazan en exceso, el Sip Kuts puede castigarlas enfermándolas, relató Casanova Morales.
Por otro lado, Casanova Morales destacó que una de las entidades más conocidas fuera de la cultura maya es el Alux, kanáan kool, k’aat, también conocido como Aluxe. A diferencia de las otras entidades, este tiene un cuerpo físico creado a partir de barro o cera de abeja mediante una ceremonia ritual que “le da vida”. Esta entidad tiene como propósito proteger las milpas, terrenos y montes de quien le ha dado vida, y se cree que su presencia permanece en el lugar incluso después de que su cuerpo físico desaparece.
Las entidades mencionadas son solo algunas de las que forman parte de la cultura maya viva actual, que es el foco de los estudios del maestro Eli Concepción. Él sostiene que esta cosmovisión ha sido transmitida a través de generaciones y muchas de estas creencias siguen vigentes entre los mayas. Más allá de si el resto de las personas creemos en ellas o no, es importante comprender que existen otras realidades que a menudo ignoramos en nuestra vida cotidiana, señaló.
Más allá de la oralidad de los relatos, la existencia de estas entidades representa una filosofía de equilibrio, respeto y protección entre la naturaleza y lo humano. Desde esta perspectiva, la tierra y los seres vivos no son recursos para explotar, sino elementos sagrados que requieren un balance con el entorno. Observar desde otras perspectivas nos invita a reflexionar sobre nuestra relación con todo lo que nos rodea, ya que los mayas siguen siendo una cultura viva que honra sus conocimientos ancestrales, concluyó el conferencista.
Reseña escrita por la maestra Angelica Farfán Peña.
